Cupido no lanza flechas de amor
En la mitología romana Cupido era conocido por ser el dios del amor, hijo de Venus (diosa del amor, belleza y fertilidad) y Marte (dios de la guerra). Un día Venus, le hizo un regalo: un arco de oro y flechas de dos clases, las de la punta de oro para conceder el amor y las de punta de plomo para sembrar olvido e ingratitud. A medida que iba pasando el tiempo Cupido ni maduraba ni crecía, seguía siendo un niño. Venus, preocupada por su hijo, consultó a Temis que le respondió: “El amor no puede crecer sin pasión”. Venus no pudo entender su respuesta hasta que nació su otro hijo, Anteros, el dios del amor correspondido y la pasión. Cupido cuando paseaba cerca de su hermano Anteros se transformaba en un joven hermoso, pero cuando se separaban volvía a convertirse en un niño “travieso y ciego”. Leer más →